Hoy voy a contar una anécdota, que me parece muy interesante, aunque no tiene nada que ver con historia económica, así que aquí lo dejo escrito para todos aquellos que quieran leerlo.
Todo Comienza con la muerte del señor Arima en 1612, este daimyo era un opositor a Tokugawa Ieyasu, y a su muerte su feudo paso a control del Shogunato.
Tokugawa, coloco como señor de Amakusa y Shimabara, a Matsukura Shigemasa (1574-1630), era un samurai fiel al shogun, y adquirió triste fama como perseguidor de los cristianos, contra quienes utilizo espías e inquisidores. También les exigió impuestos muy onerosos, en parte para desarrollar sus propias aspiraciones sociales.
La explotación de los campesinos, de esos territorios, todos cristianos, sufrieron una enorme subida de impuestos y trabajos forzosos para la construcción de una gran fortaleza en esa zona.
Matsukura murió en 1630, e Hidetada el nuevo shogun, otorgo el control del territorio al hijo de Matsukura, llamado Matsukura Katsuie, heredo una fortaleza inútilmente onerosa y una población al borde de la inanición y aun así aumento mas los impuestos a los campesinos.
En 1630, los campesinos contraatacaron y muchos se marcharon a Shimabara, fue allí donde en 1637, una pelea originada por la recaudación de impuestos creció muy rápido hasta convertirse en un motín.
Katsuie, llego con sus tropas para aplastar la rebelión, pero estos muchos campesinos que habían combatido en guerras y ronin, consiguieron derrotar a su ejercito y asesinar a Katsuie.
La Rebelión Shimabara, se considera la ultima batalla como tal del periodo samurai, los sublevados se trasladaron al castillo de Hara, para resistir la llegada de refuerzos de otras zonas cristianas o apoyo del exterior.
Al principio los rebeldes, lograron pequeñas victorias, contra fuerzas de diversos señores, que fueron a combatirlos, sin embargo rápidamente el shogun armo un enorme ejercito, con todos los clanes samurais que le eran fieles y marcho al castillo de Hara.
El lider de la rebelion era Amakusa Shiro, un joven de 17 años, al que se creía el mesías de Japón y descendiente de Francisco Javier.
Rápidamente los rebeldes acumularon artillería y armas en el castillo de Hara y allí decidieron resistir, ademas de pedir ayuda a los ibéricos.
El Shogun pronto acumulo unos 150.000 soldados y comenzó el asedio del castillo rebelde, los combates fueron muy duros y hubo muchas bajas en ambos bandos, pero los reinos ibéricos, dijeron a Hidetada que no intervendrían y los Holandeses apoyaron al Shogun, bombardeando el castillo rebelde desde sus barcos.
Finalmente, en Abril de 1638, un ataque total y combinado del ejercito shogunal abrió brecha en el castillo y lo tomo al asalto. El ejercito shogunal tuvo unas 2.000 bajas y la población del castillo y los rebeldes fueron masacrados cortándose unas 10.000 cabezas.
La rebelión Shimabara resulto ser el único obstáculo serio contra los Tokugawa en los 200 años siguientes.
Hidetada, por la influencia de la religion critiana en la sublevacion, decidio prohibirla totalmente, cerrando el comercio con los Portugueses y Españoles y en 1639, un año después, publico el decreto Sakoku o de aislamiento, permitiendo únicamente el comercio con los Holandeses, por su ayuda en aplastar la rebelión.
Japón no volvería abrirse al resto del mundo hasta 1854, y todo por culpa de una religión extranjera que interfería en el dominio del shogun, el cristianismo.
Turnbull S. The Shimabara Rebellion. 1637-1638, and Sakoku Edict. Osprey Editorial, London, 2003.
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