lunes, 3 de febrero de 2014

Crecimiento de Suecia en los siglos XVI y XVII

En la Baja Edad Media Suecia era un país de orden secundario en casi todos los aspectos, política, economía y culturalmente con respecto a los reinos del occidente europeo, su capital Estocolmo era una ciudad con cierto nivel comercial, incluida dentro de la Hansa pero con muy poca independencia, se la tenía más como una pequeña colonia alemana con la que comerciar, de tal manera que la mayoría de los funcionarios de Estocolmo no eran suecos, si no alemanes, lo que acabó provocando tensión y animadversión hacia los alemanes y su influencia.

El cambio llega en el siglo XVI con el reinado de Gustavo Vasa o Gustavo I de Suecia, (1523-1560) elegido por el parlamento de Suecia, poco después liberó Estocolmo de los daneses, poniendo fin a la presencia extranjera en Suecia y dando inicio a su crecimiento. A pesar de esto la influencia de Alemania seguía muy patente, el propio Gustavo I contrajo matrimonio con una alemana, el descontento de los suecos frente a los alemanes se aprecia como aun en 1612 se reclama la exclusión de todos los alemanes que ocupasen cargos municipales.

Comercialmente bajo el reinado de Gustavo Vasa Suecia comenzó a ganar peso y expandir su influencia por el báltico rompiendo el monopolio alemán en esa zona y iniciando relaciones comerciales con otros países como las Provincias Unidas o Escocia. Empezaron a exportar minerales en grandes cantidades e importaban sobre todo tejidos que cada vez tenían más importancia en la aristocracia sueca. A lo largo del siglo XVI Suecia siguió creciendo económicamente siendo uno de los países más fuertes del norte europeo.

La crisis del siglo XVII no le afectó mucho, gracias a la figura de Gustavo Adolfo II de Suecia (1611- 1632), hombre de voluntad enérgica consiguió utilizar la crisis en Europa para fortalecer aun más Suecia frente al resto de Europa transformando la economía del país. Con la entrada de Suecia en la guerra de los Treinta Años Gustavo Adolfo II aprovechó para realizar una reforma económica, movilizó todos los recursos del país, mejoró el cobro de impuestos, aumentó la presión fiscal y creó monopolios reales, modernizando el sistema económico sueco. A pesar de que Gustavo Adolfo II muere en la batalla de Lutzen en 1632 (El ejército sueco venció) Suecia no se vino abajo.

Básico fue el cobre, un metal más pobre pero de vital importancia en la Europa de la Edad Moderna, ya que ante la crisis del siglo XVII por ejemplo en Castilla se emite mucha más moneda de cobre, también se usaba en el viejo continente para hacer objetos de cobre colocando a Suecia como el primer productor de cobre de Europa, sobre todo bajo gobierno del rey Gustavo Adolfo II que creo la Compañia Comercial de Suecia para controlar su comercialización y sacar mayores ingresos. Además fomentó una industria armamentística que hizo a Suecia independiente en este aspecto.

Suecia pasó en poco más de 100 años (1523-1632) y con dos figuras básicas (Gustavo I y Gustavo Adolfo II) de ser un estado muy secundario y atrasado a ser una monarquía moderna, fuerte militar y económicamente y que cada vez iba ganando más peso a nivel Europeo


No hay comentarios:

Publicar un comentario